El inicio de la temporada invernal exige la adopción de medidas especiales en distintos ámbitos de la operación en faena, tanto en las zonas de cordillera como también en las zonas desérticas y en los valles.

Por esta razón es que Schwager ha iniciado una campaña de conducción segura en temporada de invierno y que busca que todos quienes conducen vehículos motorizados al interior de las faenas o en los caminos y carreteras para desplazarse desde o hacia el trabajo. 

Las recomendaciones buscan que los conductores adopten una serie de medidas de seguridad en condiciones climáticas adversas. 

En este sentido, la lluvia afecta directamente la adherencia del vehículo al piso, por lo que se debe minimizar el riesgo conduciendo a velocidad razonable y prudente, además de mantener en buen estado neumáticos, frenos y asegurar la limpieza del parabrisas.

Del mismo modo, el sol, la neblina y la camanchaca nortina disminuyen la visibilidad al punto de no ver más allá de unos metros del vehículo, por lo que es aconsejable orillarse y disminuir la velocidad o detenerse si es necesario, poniendo las señalizaciones viales correspondientes.

Por su parte, el viento provoca polvaredas o caída de ramas y árboles a las vías, las cuales pueden generar la pérdida de control del vehículo. Por ello, se debe estar atentos a las condiciones del clima, disminuir la velocidad y esperar que mejoren las condiciones.

Conducción en zonas cordilleranas

En las zonas de tránsito de cordillera en época de invierno también se requieren medidas preventivas y que deben ser aplicadas al momento de la conducción.

El frío en la zona de montaña hará que los vidrios se empañen reduciendo la visibilidad. En caso de producirse esta situación es recomendable mantener los sistemas de ventilación del vehículo encendidos en la posición de antiempañante. Sin embargo, la temperatura no debe ser tan alta para no generar sensación de adormecimiento.

En caso de presencia de nieve, se debe conducir lentamente y realizar maniobras suaves. También se debe aumentar la distancia de seguridad con otros vehículos, utilizar cadenas, utilizar las huellas dejadas por otros vehículos y no adelantar en el viaje. 

Por otra parte, los caminos cordilleranos son con pendientes, por lo que hay mantener la transmisión enganchada en una marcha baja, tanto para subida o bajada en el camino.