Un gran incendio afecta a una extensa zona de la selva amazónica y ha generado múltiples reacciones a nivel global. Efectivamente, se está quemando la reserva biológica más importante de la tierra, poniendo en riesgo la capacidad del planeta para eliminar el CO2 del aire y afectando de manera directa los sistemas climáticos globales.

Diferentes líderes mundiales han reaccionado de manera enérgica ante lo sucedido, haciendo llamados a combatir la catástrofe y adoptar de una vez por todas acciones que puedan revertir de manera definitiva el cambio climático.

El Presidente francés, Emmanuel Macron, en el inicio de la Cumbre del G7 en Biarritz, llamó a las potencias mundiales a movilizarse para sofocar los incendios que asolan el Amazonas y amenazó con bloquear el acuerdo con el Mercosur si Brasil no adopta medidas urgentes para combatir esta crisis y adopte medidas medioambientales concretas. Por su parte, el Primer Ministro canadiense, Justin Trudeau, señaló que el tema debía ser el principal objetivo del trabajo del Grupo G7 en Biarritz.

Sin embargo, la discusión por el cambio climático ha sido intensa en los últimos años, pero sin muchos resultados. Lo fundamental hoy es que el cambio climático y las acciones para revertirlo debe estar en la agenda de todos los gobiernos. Este es el momento para apurar los cambios. La Humanidad está más sensible con el tema y con mayor disposición para enfrentar este problema, por lo que este es el momento de actuar. Los diferentes foros internacionales deben acelerar el paso y se debe comenzar a escuchar los planteamientos hechos por las Naciones Unidas, al igual que otros organismos.

Esto último no exime a las personas a hacer sus propias acciones contributivas y a cambiar responsablemente sus hábitos de vida (la conducta de los chilenos frente a las bolsas plásticas sin duda que es un ejemplo a seguir y a mejorar). Por ejemplo, un reciente estudio de la Universidad Nacional Autónoma de México informa las potencialidades del uso de los autos eléctricos, generando beneficios económicos con respecto al consumo de la gasolina y reduciendo de manera dramática las emisiones.

Son muchas las acciones concretas con que cada uno de nosotros puede aportar, ya sea, cambiando hábitos, reemplazando productos contaminantes o simplemente creando conciencia de la necesidad de proteger el planeta. Por eso, mi reconocimiento a la joven activista sueca Greta Thunberg, que está en un incansable llamado a enfrentar esta problemática. Ese es su aporte y es la hora de preguntarse cuál es el nuestro.

 

Alex Acosta M.

Presidente Ejecutivo

Schwager Service S.A.